Rafael Cadenas y el poeta español Antonio Gamoneda ofrecieron un recital como parte del encuentro «Diálogos Poéticos» el pasado jueves 26 de mayo, en el Club de la Prensa del Diario de León.
A la buena gente se la quiere enseguida, no necesita el aval del tiempo. El poeta Rafael Cadenas ya forma parte de nuestro parnaso de afectos, y acabamos de conocerle en persona. Él y Gamoneda mantuvieron un diálogo poético, muy bien moderado por Eloísa Otero, en el Club de Prensa de este periódico, y bajo el patrocinio y organización de Abanca. Tuve el honor de levantar y de bajar el telón invisible. Me reafirmo en lo que dije allí: cada día, en una gran ciudad o en una pequeña, ante cientos de personas o ante una docena de ellas, está teniendo lugar actividad cultural en la que el mundo queda aliviado de sus heridas. El pasado jueves, León fue una de esas embajadas de la dignidad. Entre lo mejor que en aquel momento estaba ocurriendo en el campo de la poesía, en España y fuera de ella, sin duda, estaba ese diálogo entre dos amigos octogenarios y a la vez jóvenes. Una celebración de la fraternidad, sin necesidad de recurrir al intercambio de elogios; cada uno se limitó a leer su propia obra, pero ¡cómo la leyeron! Gamoneda antes se hizo una pregunta: “¿Acaso no es también realismo esos toros celestes del Llanto a la muerte de Ignacio Sánchez Mejías?”. Se contestó: “Sí, lo es”. Y asentimos. La realidad es un enigma poliédrico. Esa tarde el mundo fue metáfora viva, que hizo más grande a nuestra pequeña ciudad.
Cadenas vino acompañado de amigos compatriotas, entre ellos Nelson Rivera y Antonio López Ortega, con quienes tuve ocasión de conversar sobre el sufrimiento de Venezuela. No les escuché una sola palabra de odio; muchas, sí, de lucidez crítica hacia el poder y de noble amor a su patria, expresada con la transparencia que da tener razón. También, tras largo viaje en coche, asistió el poeta gibraltareño Trino Cruz. La tarde anterior, paseando por la calle Ancha, coincidimos en que el final de Amarcord es de los más bellos del cine. A veces, Fellini sacaba de su memoria bellos toros celestes.
Ya en casa cojo el último libro del venezolano, En torno a Basho y otros poemas. Lo abro al azar, que no existe y está: “Si la piel se cierra/ ¿a dónde van a dar las palabras?”. Cadenas venía de recoger el Internacional de Poesía García Lorca. ¿Alguien necesita una explicación?
Fuente El Nacional / El Nacional Web
Originally posted 2016-06-30 22:01:49.