hamaca, chinchorro, tejidos, Venezuela, tradición, artesanal
Si algo es común para los venezolanos es disfrutar del descanso en un chinchorro o hamaca, enseres de origen indígena fabricados de forma artesanal, presentes en la mayoría de los hogares del país, donde son utilizados para pasar momentos de tranquilidad y relajación.
Como dato curioso encontramos que la palabra chinchorro viene siendo usada desde antes de Cristo, al ser el nombre con el que se identificó la “cultura chinchorro”, un pueblo de pescadores que habitó al norte de Chile, el significado de este nombre también se asocia a la técnica de momificación usada por este grupo.
Mientras que la hamaca se asocia al origen de la civilización, elaborada por los indígenas de América Central y del sur, a la que denominaron “cuna de los dioses”. Pese al pasar de los siglos, sigue siendo una de las piezas favoritas para la siesta de todos, desde el bebé hasta los abuelos, en la casa, en la playa o en cualquier lugar al aire libre.
Significado y técnica
La Real Academia Española (RAE) ha definido chinchorro como “hamaca ligera, tejida de cordeles o fibra”. Por su origen de creación indígena forma parte de la cultura suramericana, al tener características propias de materiales de elaboración, colores y diseño, manteniéndose su frescura y comodidad como principales atributos.
En Venezuela la diferencia entre estas dos piezas se debe al tipo de punto utilizado en su elaboración, el tejido del chinchorro es abierto y elástico; mientras que el de la hamaca se teje una trama tupida como una tela, compartiendo las técnicas de malla, cadeneta, tripa o la caireles.
Tanta variedad como regiones del país
La mayoría de las regiones del país, tiene su estilo en la fabricación de hamacas y chinchorros, caracterizado por los materiales utilizados y técnicas. Por ejemplo en el estado Nueva Esparta, Anzoátegui se usan fibras de algodón hilado, conocido como pabilo o guaralillo, de color crudo.
En la zona de los Andes, en los estados Mérida y Táchira se utiliza lana de oveja. En Falcón y Lara, se tejen chinchorros con el hilo secado de las dentadas hojas del cocuy, llamado hisopo o dispopo. Mientras que en Amazonas los indígenas Yanomami utilizan bejuco de mamure o moriche, para finalizar en la península de la Guajira donde las tejedoras utilizan algodón mercerizado. De acuerdo a la investigación reflejada en el Atlas de Tradiciones de Venezuela, de Fundación Bigott.
Hamacas para todos los gustos
Si bien su origen es milenario, el uso de la hamaca sigue estando presente en nuestra cotidianidad, lo que ha llevado a que su diseño se diversifique, con una variedad de modelos y tamaños adaptados para todos los gustos, desde el modelo clásico hasta nuevas formas, que se pueden encontrar en hoteles, resort, posadas y en muchos hogares donde se mantiene la costumbre de dormir o descansar en una hamaca cómoda.
Curiosidades
En la isla de Margarita, al norte se encuentra el “pueblo de los chinchorros” en la zona de Santa Ana, llamado así porque en casi todas las casas se elaboran chinchorros, de diferentes colores y tejidos, con o sin flecos.
En la zona de Aguasay, estado Monagas se produce la caragua una planta de la familia de las bromelias, cuyos hilos blancos son utilizados para el tejido de chinchorros, fabricación de bolsos y muñecas. Elaboración que ha obtenido el reconocimiento de la Unesco al declarar patrimonio cultural e inmaterial “los conocimientos y técnicas vinculados al cultivo y procesamiento de la curagua en Venezuela.
Fuente Rootsalad
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Originally posted 2016-09-08 20:04:35.
