Gustavo Aguado, Guaco, director de guaco, músico venezolano
Gustavo Aguado tiene en su teléfono celular un audio que le envió una coterránea maracucha desde Suiza, que ilustra, de manera sencilla, el alcance de las melodías de la agrupación que lidera. Allí la amiga le dice que un suizo, “parecido a Pedro, el de Heidi”, le contó que para él Guaco había inventado una nueva música. “Escuchar eso me cacheteó. Y no lo digo yo”.
Aguado lo contaba con orgullo en la antesala de una gira que efectuará este mes con “la Superbanda de Venezuela” por 13 ciudades de Japón, luego de visitar países como Estados Unidos, Panamá y República Dominicana. Con la misma soltura se presentan en Margarita que en Canadá. Aunque le tiene fobia a los aviones, este músico que está en Guaco desde sus inicios, lleva el ritmo de la banda en su trashumancia planetaria. En los rincones más inesperados del mundo se consiguen coterráneos que tararean sus canciones. “Ochenta por ciento suelen ser venezolanos que se sienten como en casa. Bailan igualito en las mesas. Les llevamos la Venezuela que dejaron atrás”.
Algunos de esos conciertos estarán reflejados en un documental dirigido por Alberto Arvelo sobre la agrupación, que en abril del año próximo prepara un regalo para sus fieles: un disco bautizado Bidimensional, en el que sus clásicos estarán interpretados por la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar bajo la batuta de Gustavo Dudamel. Esa producción también ofrecerá temas nuevos interpretados por la banda. Además, tendrá una obra de Carlos Cruz Diez en la portada.
Aguado escucha la maqueta de “Las caraqueñas” en versión sinfónica y se transforma. Canta, se emociona y pareciera que la música comienza a gobernar cada fibra de su humanidad. Como productor del grupo le corresponde elegir las canciones que interpretan. Luego de escuchar centenares de melodías que le llegan de todo el país, hace que niños cercanos de tres o cuatro años escuchen las favoritas. “Si al rato tararean cinco compases, esas van. Una melodía que le llega a un niño no puede fallar”.
Tiene 66 años de edad, 54 de ellos con Guaco. Pero señala su cabeza con el dedo y sentencia: “Aquí tengo 25”. Que esta banda -que nació en Maracaibo en 1964 como un grupo de gaitas- haya evolucionado y permanecido vigente hasta ahora, cosechando reconocimientos planetarios como las nominaciones a los premios Grammy, indica que sus méritos encierran muchas proezas. “Muchas veces me han preguntado la fórmula. Técnicamente, no lo sé. Para mí, es divino, obra de La Chinita y La Divina Pastora”.
Mantenerse en sintonía con los tiempos es parte de la receta. A eso se suma la flexibilidad de una música que acepta a su manera las influencias de cualquier frontera. “Este es un planteamiento venezolano a la música popular. Somos toderos. Fusionamos distintos ritmos, pero el arreglo siempre nos da la sonoridad nuestra”.
Hasta noviembre permanecerán en Japón. “Voy a pasar el Día de la Chinita allá. ¡Qué molleja!”, se asombra. El año que viene Guaco cumplirá 55 años. Llevan más de 50 discos y Aguado ya perdió la cuenta. Según sus cálculos, ahora es que queda. “Aún no lo hemos logrado. Todavía falta más”.
“Hubo momentos en los que no se daban las cosas, pero siempre dijimos ¡pa’lante! La perfección no se logra y de los errores uno aprende”
En Instagram: @gustavoguaco
Fuente Todo En Domingo
Gustavo Aguado, Guaco, director de guaco, músico venezolano
Originally posted 2016-10-24 19:56:15.
