El mundo de las computadoras siempre fue de su interés, explorar los archivos ocultos en el sistema operativo fue lo primero que le llamó la atención.
Luego descubrió una carpeta con un lenguaje de programación que le dio un rumbo diferente a su vida. Gracias a estos descubrimientos se encuentra realizando emprendimientos en aplicaciones digitales.
Christopher Chancé es un venezolano de 16 años de edad que reside en Argentina desde enero de 2013. El joven es un emprendedor y programador que se ha formado y materializado algunas de sus ideas. Su interés por estos temas inició desde muy temprana edad, cuando lo hacía solo por diversión.
Desde su empresa DataXype anunció Cuídalos, una aplicación para proteger a las personas mayores a distancia conectándolas con diversos servicios que desde la compañía desarrolla.
Christopher cuenta en exclusiva para El Diario que gracias a esta iniciativa tecnológica una diputada argentina lo invitó al Congreso para charlar, también el secretario de Innovación y Transformación Digital del gobierno de la ciudad de Buenos Aires se interesó en la idea de incluir a los adultos mayores en este tipo de innovaciones.
Su inspiración para la creación de este proyecto es su abuela Luisa. El joven de 16 años veía cómo su abuela utiliza la tablet para dibujar y cuando salía de la aplicación le constaba regresar.
En ese momento comprendió que las apps actuales están desarrolladas, en su mayoría, para los niños, adolescentes y adultos jóvenes.
“Nunca se toma en cuenta a las personas mayores, tal vez porque no son un segmento de mercado tan grande y por lo tanto menos lucrativo”, explica.
Asegura que su foco actual es seguir desarrollando diversas plataformas para las personas de la tercera edad para que puedan ser parte del siglo XXI y sus maravillas tecnológicas.
Cuenta que mientras creaba Cuídalos le daba el celular a su abuela para que ella misma le diera su opinión y la probara, así el obtenía la retroalimentación necesaria para seguir potenciando su idea.
“Con esta iniciativa mi abuela siempre me dice que hace mucha falta cosas como estas porque los abuelos sí importan. A pesar de que no entiende la tecnología que hay detrás de la creación, le gusta la idea en síntesis”, dice.
En sus planes a largo plazo está mantener a Cuídalos y afirma que siempre será una aplicación gratuita, pero las personas que deseen servicios personalizados deberán pagar.
Para este año tenemos proyectado una estimación de ganancias cercana al 1.000.000 de pesos argentinos. Obviamente esto será luego de que lancemos el plan pago, que será un mes después de la fecha de lanzamiento”, comenta.
Inicios en la programación
“Cuando tenía ocho años me gustaba mucho jugar con la computadora, como cualquiera. Pero también me gustaba mucho buscar archivos ocultos dentro del sistema operativo, es decir, dentro de Windows. Primero veía para qué era el archivo y para qué servía. Un día me encontré con uno que adentro tenía palabras en inglés pegadas por puntos y comillas, cuando lo abrí entendí solo las palabras y eso me generó curiosidad”, cuenta.
Los tutoriales en YouTube, los libros en PDF y Google fueron sus grandes compañeros para entender poco a poco cada cosa que hallaba en la computadora. En una ocasión encontró un archivo JavaScript y le dio mucha intriga conocer acerca de eso.
Su emoción aumentaba, después de leerse un par de libros del lenguaje de la programación entendió lo básico y a partir de eso empezó a crear juegos, pero al mismo tiempo pensaba que quería innovar con lo que había aprendido.
“Busqué cosas similares y así fui aprendiendo más tecnologías, hasta el día de hoy sigo estudiando tecnologías como computación cuántica”, asegura.
Chancé recuerda que cursaba primaria en Venezuela siempre hacía cosas con lo que aprendía en clases. Un día logró hacer un videochat, en aquel momento usó las Canaimas – computadoras entregadas por el Estado – y conectó a todos sus compañeros mientras estaban en clases.
Comenta que cuando estaba más pequeño pensaba que tenía el superpoder de programar y de crear cosas en la computadora.
“Todo lo que hice, lo que hago y lo que haré es por mi futuro y por el de las personas a las que ayudaré con mis soluciones”, dice el joven venezolano.
Su pensamiento de siempre buscar soluciones lo llevó a fundar DataXype, una empresa para desarrollar ideas que generen cambios positivos para el mundo utilizando la tecnología.
Desde que fundó DataXype cuenta con el apoyo de IBM, empresa que mediante el programa Starup whit IBM respalda a empresas emergentes para que accedan a la tecnología que necesiten para que el desarrollo de sus proyectos evolucione y se conviertan en grandes innovaciones.
IBM International Business Machines es una cooperación multinacional de tecnología informática y consultoría con sede en Estados Unidos.
Sin embargo, antes de este momento tuvo otras compañías emergentes. La primera la inició cuando tenía 12 años de edad, SocialForAll.net una red social para conectar gamers con desarrolladores de juegos.
Después tuvo otra en la que ofrecía servicios para organizadores de eventos la cual funcionó hasta finales del año 2019. Estas dos apuestas logró empezarlas gracias al apoyo de Google con Cloud for Startups.
Su inspiración siempre ha sido Mark Zuckerberg. Desde que aprendió a programar siempre quiso hacer el segundo Facebook y por eso su primer proyecto publicado fue una red social.
Aparte de su gran amor por la programación, desde hace varios años también se ha dedicado a ser conferencista y ha viajado por diferentes provincias de Argentina, Paraguay y Uruguay para charlar de diversos temas tecnológicos.
Apoyo
Aparte del apoyo de IBM, cuenta con el apoyo de Twilio, una empresa estadounidense que ofrece servicios de comunicaciones.
Actualmente Christopher cursa 4to año de bachillerato, ha recibido propuestas de otras escuelas de Argentina para continuar sus estudios, pero asegura que aún no se han acercado las propuestas de becas universitarias. “Si recibiera una, la aceptaría. Considero que siempre se debe seguir estudiando”.
A pesar del gran ingenio con el que cuenta desde muy temprana edad, no se considera un joven prodigio pues piensa que lo que él hace lo puede hacer cualquiera sin importar la edad.
Con su corta edad ha alcanzado a cumplir parte de sus sueños, nunca se imaginó que por tener una pequeña curiosidad con algunos archivos de su computadora lograría llegar a este punto: ser un emprendedor e innovador venezolano en otras tierras.
Su mensaje para los jóvenes de su edad es que nunca se rindan pues “siempre habrán caídas, pero lo importante siempre es levantarse y perseverar”.