En 2013 Andoni Goicoechea, un médico (28 años) con doble nacionalidad venezolana y española, abandonó Venezuela como otros miles de compatriotas asfixiados por la crisis económica, política y social para desembarcar en Madrid. Convalidó sus estudios y empezó a trabajar en el hospital de La Paz. “Me encantaba el servicio, las guardias, etc., pero salía a las 15.00 y tenía demasiado tiempo libre e hice planes de negocio… Todas las ideas las maduraba tomando una cerveza en un pequeño local de María de Molina, en el edificio donde vivía mi mejor amigo”.
Por casualidad, un día ese negocio cierra y Andoni le propone al propietario hacerse cargo, ya que “siempre pensé que en esa calle y con esa ubicación, frente al Instituto de Empresa, un local de pizzas o de hamburguesas rápidas podía funcionar”. En este humilde proyecto de fast food se involucraron después una amiga diseñadora de Andoni y su hermana Daniela que dieron una vuelta al concepto en busca de las mejores hamburguesas de Madrid, “les pusieron queso brie, pasamos de usar el pan de mollete a otro tipo brioche, mejor carne cada vez…”. Así nació Goiko Grill.
La expansión llegó a los seis meses. “Llevaba seis meses con el local abierto y un año y medio de postgrado en La Paz, con más guardias, más pacientes y mayor responsabilidad. Al tiempo, el local funcionaba cada vez mejor”, recuerda el emprendedor. La atención, sin embargo, no era la mejor, reconoce; “se notaba que el dueño se dedicaba a otras tareas. Había días de guardia que salía y dormía en el parking de María de Molina para tres horas después abrir el restaurante… una vida de locos”. Tras meditarlo, Andoni abandona la medicina y apuesta por el potencial que veía en el restaurante, con idea de abrir un segundo establecimiento. La inauguración llegó en Conde de Peñalver.
Al tiempo llegaron a España unos conocidos venezolanos de confianza del empresario con la idea de establecerse y abrir un negocio fijándose en el ambiente y el modelo de su compatriota. A pesar de que Andoni no pensaba en asociarse ni en franquiciar, probó suerte, “lo que supuso un esfuerzo brutal para crear manuales, procedimientos, formación, etc…”. Así nació el tercer local y una fórmula de franquicia que luego se extendió. “Procuramos mantenernos en familia, con gente que piensa como nosotros en términos de calidad, atención y negocio. Es decir, que la gerencia esté todos los días haciendo que el producto sea el mejor en el restaurante”.
En este sentido, el fundador de la cadena recalca que los principios del negocio “no es el puro enriquecimiento, sino que queremos un buen producto y una marca que hagamos crecer entre todos y, sí, ganar el máximo dinero posible con la mejor eficiencia, pero desde el buen trabajo. Normalmente los grupos que están franquiciando no buscan eso, sino la rentabilidad inmediata. Por eso, a pesar de que queramos expandirnos, no queremos que se nos identifique con una franquicia al uso”.
El tiempo les ha dado razón en esta apuesta en la que combinan gran calidad, ambiente agradable y desenfadado, una relación calidad-precio indiscutible y guiños en los ingredientes a Venezuela y el origen vasco de la familia Goicoechea (tequeños, guacamole, cambur, Idiazabal, pimientos del piquillo, etc.). Sus seis locales (tres propios y tres franquiciados) funcionan a pleno rendimiento, con lleno de reservas los fines de semana sin necesidad de hacer publicidad (un solo tuit bastó). “Esto nos indica que el mercado de la hamburguesa gourmet no está saturado en Madrid, ya que las ventas siguen subiendo en todos a pesar de las nuevas aperturas. Nos reafirma en que debemos asentarnos en los barrios, con más locales, pequeños, bien ubicados y adaptados al área a la que atienden. Es la vía de éxito”, aclara el fundador de la cadena.
Bajo esta premisa, Goicoechea sitúa en tres el número de nuevas hamburgueserías que entrarán en funcionamiento en la Comunidad de Madrid hasta final de año, “dos en el centro de la capital y una tercera en Pozuelo de Alarcón. Veremos cómo funciona todo en 2015 para pensar en la estrategia del año siguiente; pensamos que nuestro tope en Madrid debe ser de 15 establecimientos”. Para estos planes de crecimiento la firma mantiene la intención de tener un equilibrio de 50% entre los locales propios y los franquiciados de confianza, a pesar de que sin publicitarse “nos llegan al mes 42 solicitudes de inversión”.
Fuente Talentos Venezolanos
Originally posted 2016-04-25 22:52:12.