10 refranes venezolanos que un español nunca entendería

Notes

refranes venezolanos, español, nunca entendería, venezolanos en el exterior

La cultura venezolana está caracterizada por el uso de refranes, algunos que compartimos con otros países, y otros que son muy nuestros. ¿Alguna vez te has preguntado si alguien de otro país entendería los refranes que usas frecuentemente?

En nuestro día a día es muy común que usemos expresiones y refranes venezolanos. Quizás algunas de ellas sean compartidas con países vecinos con los que tenemos cierta afinidad cultural, y de hecho así lo es.

Algunos países como Colombia o Ecuador comparten con nosotros expresiones típicas que, probablemente por motivos históricos, haga que confluyamos en los dichos populares. Hay otros que son de uso generalizado y que están presentes en todos los países donde se habla español. Y sin temor a equivocarme, hay otro tanto que es de cosecha propia y que a través de los años los hemos alimentado de a poquito.

Quizás te preguntes por qué estoy tan seguro de ello. Y es que, desde que me vine a vivir a España, en algunas ocasiones se me ha escapado alguno que yo, ingenuamente, pensaba que pertenecían al grupo de “los que dicen en todos los países de habla hispana”.

Pero no, al ver la reacción de los españoles pude darme cuenta de lo muy autóctono y venezolano de algunos refranes que, sin duda alguna, nos representan y diferencian del resto de los países.

Los 10 refranes venezolanos que más nos identifican

A continuación, te dejamos algunos de los refranes venezolanos, unos más utilizados que otros, pero todos muy típicos de nuestra tierra.

1. Estar como cucaracha en baile de gallina

No pertenecer a un lugar o sentirse incómodo por estar en el sitio equivocado, nunca es lo mismo para un venezolano sin este refrán.

No hay otra expresión que describa tan acertadamente esas situaciones en las que queremos que nos trague la tierra.

2. Cachicamo diciéndole a morrocoy conchudo

Este refrán tiene dos palabras claves que un español jamás entendería: cachicamo y morrocoy, que corresponden a un armadillo y una tortuga, respectivamente.

El significado es muy sencillo y, a través de esta metáfora, lo utilizamos para indicar que otra persona no tiene moral para reclamarnos o reprocharnos algo porque comete el mismo error que nosotros.

3. Es más la bulla que la cabuya

Cabuya, ¿eso qué es? Yo, que nací y crecí en Venezuela, en algún momento me he preguntado por qué le llamamos de esta forma tan particular a una cuerda o cordel.

Pero esto no termina ahí, porque además la palabra la empleamos en un refrán de los más comunes. Su significado es simple: alguien que es más lo que dice, que lo que hace. Pero con esta palabra tan particular, ¿quién más lo puede entender además de un venezolano?.

4. Estar como caimán en boca de caño

Estar a la expectativa y “estar como caimán en boca de caño” parecen ser sinónimos en nuestro país. Debo reconocer que es uno de los refranes venezolanos que de pequeño más me costaba comprender, porque es tan particular que ni siquiera uno de nosotros sería capaz de entender a la primera.

Y si no lo entiendes, lo mejor es que lo grafiques en tu mente y con certeza “te caerá la locha”.

5. Chivo que se devuelve se esnuca

Por lo general, usamos este dicho en dos contextos:

1) Cuando alguien toma una decisión y en poco tiempo se arrepiente.

2) Cuando nos marchamos de un lugar y por cualquier motivo nos tenemos que devolver.

Dicen por ahí que su origen tiene que ver con el comportamiento de estos animales en las laderas. Y si es cierto o no, no lo sé, pero no puedo contar las veces que lo he usado.

Por cierto, cuando lo usamos solemos decir “esnuca”, en lugar de “desnuca”. Esto lo hace tener doble sello venezolano.

6. El que nace barrigón, ni que lo fajen chiquito

Palo que nace doblado, jamás su tronco endereza… Es así como reza un dicho en otros países hispanohablantes.

Me imagino que con la idea de diferenciarnos del resto, creamos nuestra versión criolla y no podía ser otra sino “El que nace barrigón, ni que lo fajen chiquito”. Nuevamente, muy gráfico y representativo de la cultura popular.

7. ¿Y tú cómo sabes que La Guaira es lejos?

A decir verdad, La Guaira no queda tan lejos de Caracas. Pero más allá de la distancia, ¿qué relación tiene lo lejos que pueda estar con el uso que le damos a esta frase?

Darle doble sentido a lo que alguien haya dicho, haciéndole sentir comprometida su reputación, no es lo mismo sin este célebre refrán. Un comportamiento, sin duda, muy típico de las últimas generaciones.

8. Ser más duro que sancocho de pato

¿Cuántos venezolanos alguna vez se han comido un sancocho de pato? Parece que muchos porque con certeza, saben lo dura que es esta carne.

Y de la misma forma lo trasladamos a nuestra familia y amigos que se resisten a acceder a nuestras peticiones. De verdad que hay gente que es más dura que sancocho e’ pato.

9. Mapurite sabe a quién pea

“¡A mí no me va a fregar! Mapurite sabe a quién pea”. Este es uno de los  refranes venezolanos con el que demostramos que tenemos carácter, y dejamos muy claro que lo que alguien le hace o dice a otro, ni por error se atrevería a hacérnoslo a nosotros. ¿Qué es un mapurite? se preguntarán los españoles.

10. A cada cochino le llega su sábado

¿Te has imaginado cómo reaccionaría un español si le dijeras este refrán? Probablemente se preguntaría qué tiene que ver un cerdo con el día sábado.

Y como la mayoría de nosotros, sabes qué significa y en qué ocasión utilizarlo, pero al igual que un español, no tienes ni idea de qué tiene que ver una cosa con la otra. ¿Será que era el día que solían sacrificarlos? Si tienes la respuesta, déjala en los comentarios.

Funete Rootsalad

refranes venezolanos, español, nunca entendería, venezolanos en el exterior