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El Salto Ángel
No tan solo es la cascada más alta del mundo, respaldada por los Récord Guinnes (979 metros de caída libre) sino que es un sitio de lleno de energía y belleza. Ver el Salto Ángel caer desde el Auyantepuy es quedarnos mudos de asombro y sentir que somos muy pequeñitos ante las maravillas de la naturaleza.
La Gran Sabana
Más de 10 mil kilómetros cuadrados se extienden al sur del estado Bolívar para regalarnos un paisaje único lleno de tepuyes (mesetas). Se trata de las formaciones rocosas más antiguas del planeta, hoy cubiertas por cascadas, ríos, selva, valles y una fauna variada. Al igual que el Salto Ángel, forma parte del Parque Nacional Canaima uno de los parques más extensos del país.
Laguna verde, Sierra Nevada
No es la única laguna que se deja ver en el estado Mérida, pero sí una de las más hermosas. Es de origen glaciar y está a los pies del pico Humboldt, el segundo pico más alto de Venezuela. Debes apurarte a visitar este lugar. Este paisaje alucinante podría desaparecer en pocos años, debido al calentamiento global que afecta directamente a los glaciares de la zona.
Cayo de Agua
En varias oportunidades la han incluido en las listas de las mejores y más bellas playas del mundo. Y es que este cayo en el archipiélago Los Roques tiene todo lo que nos gusta: agua tibia, pozos de agua dulce, azul de varios tonos y dos orillas que se encuentran en ese puente natural de arena. ¡Así es el Caribe venezolano!
El Roraima
Lo llaman “el mundo perdido”, y es uno de los tepuyes más enigmáticos en la Gran Sabana venezolana. Es posible llegar a su cima si uno está dispuesto a una travesía de al menos siete días (entre subir y bajar). En el camino, podrán ver formaciones geológicas únicas y unos jacuzzis insólitos.
Si van a aguantar el frío, entonces se pueden dar un buen baño.
El Salto Para
Imaginen siete cascadas a lo largo de poco más de 5 mil metros, cayendo con una fuerza que intimida. Ese es el Salto Para, el que delimita el cauce del río Caura en el estado Bolívar y que hoy se ve tristemente afectado por la minería.
El relámpago del Catatumbo
El sur del lago de Maracaibo, donde se da este fenómeno, fue recientemente declarado por la NASA como la capital de las tormentas eléctricas. Desde abril y hasta finales de noviembre se pueden ver estos relámpagos y rayos cubriendo a los pueblos de Ologá y Congo Mirador. Una belleza inigualable.
Los Médanos de Coro
Es increíble que en un país que tiene selva, playas, picos nevados, llanuras y sabanas, también haya desierto. Los de Coro son los más conocidos y sus dunas alcanzan hasta 8 metros de altura. Pero también hay médanos hacia los llanos y en el estado Zulia (donde no hay que dejar de ver la isla de Zapara).
Los ríos Orinoco y Caroní
El Orinoco es el río más extenso y caudaloso del país, seguido por el Caroní que desemboca en el Orinoco. Lo que sucede cuando ambos se encuentran es único: sus aguas no se mezclan por la composición propia de cada río. Así que se puede diferenciar muy bien el uno del otro.
La cueva del Guácharo
Esta cueva en el estado Monagas fue vista por el explorador Alexander von Humboldt en 1799 y está entre rocas que datan de hace más de 130 millones de años. Se extiende poco más de 10 km y el hábitat principal del guácharo, un ave que necesita vivir en la oscuridad.
Fuente Matador Network
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Originally posted 2017-01-26 15:51:37.
